Tradicionalmente en la novena han ido viniendo diferentes sacerdotes a predicar. Hasta la llegada de los Misioneros Oblatos cada día de novena por la tarde venía alguno diferente de la zona a compartir la novena. A partir de 2004 han ido pasando diferentes sacerdotes misioneros haciendo con nosotros la novena.
Este año será diferente. En la celebración de la Eucaristía de la tarde vendrán diferentes personas a dar testimonio de su fe: un padre de familia, una viuda, un matrimonio... así nos ayudarán a todos a enriquecer nuestra visión de la fe en Jesucristo y en la Iglesia. Podremos ver así, que la Iglesia somos todos, que la Iglesia es pueblo de Dios que peregrina al encuentro del Señor. Dicho de otra forma, que la Iglesia no son sólo los curas y las monjas, sino todo bautizado.
El deseo del P. Antonio, nuestro párroco, es ayudarnos a todos a adaptarnos a los nuevos tiempos no sólo en la sociedad que nos rodea sino también en la fe en Cristo Resucitado con la fuerza de su Espíritu.
Este año será diferente. En la celebración de la Eucaristía de la tarde vendrán diferentes personas a dar testimonio de su fe: un padre de familia, una viuda, un matrimonio... así nos ayudarán a todos a enriquecer nuestra visión de la fe en Jesucristo y en la Iglesia. Podremos ver así, que la Iglesia somos todos, que la Iglesia es pueblo de Dios que peregrina al encuentro del Señor. Dicho de otra forma, que la Iglesia no son sólo los curas y las monjas, sino todo bautizado.
El deseo del P. Antonio, nuestro párroco, es ayudarnos a todos a adaptarnos a los nuevos tiempos no sólo en la sociedad que nos rodea sino también en la fe en Cristo Resucitado con la fuerza de su Espíritu.
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